miércoles, julio 25, 2007

Carta a un viejo amor

Tu sabes bien lo que en su momento siginificaste para mi. No negaré todo lo que llegue a sentir en un momento dado por ti; fue algo real, inmenso, y, hasta ese momento, lo mas grande que había podido experimentar junto a otro hombre.
Me sacaste de las sombras de la melancolia, el desconsuelo y el desamor, para mostrarme que podía aun sentir amor, que todo estaba en mi actitud,y que era atractivo para algunos.
Y así iniciamos una aventura que fue de lo virtual a lo real. De mi curiosidad por hablar contigo, por conocerte, hasta el enamoramiento total de parte de ambos y de L tambien, que fue quien nos presentó.
Intentamos ser 3. No sabíamos que uno estaba de mas en esta relación. Herí a quien menos se lo merecía y perdí a alguien que hubiera podido ser un buen amigo. Pero eso no importaba realmente.
Tuvimos retos que nunca pudimos vencer, tanto tu como yo. Ambos teníamos una vida en nuestros lugares de residencia. Yo ofrecí dejarla, tu me lo impediste, y yo hice exactamente lo mismo contigo cuando mecnionaste que querías venir a radicar aquí. No podíamos dejar las cosas a medias: mi carrera y tu titulación
Tambien se atravesaron otros factores: tu relacion con L (a pesar de que todos veian claramente que no iba a durar mucho mas), mi falta de caracter para exigirte una relacion seria, tu indecisión, el no poder vernos mucho, entre otros. Todo esto junto fue como una bola de nieve en una pediente: Se fue agravando la situación lentamente, hasta el punto de que tu tuviste que tomar una decisión. Y yo tomé la mia.
Ahora solo queda una amistad que cuidar, pues me importas como amigo.
¡Cuidate y se feliz!

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