Mitsubishi Eclipse Spyder

Aprovechando que la época de mucho sol y calor está comenzando, Mitsubishi tiene lista la versión más extrovertida del Eclipse: el convertible.

Los resultados que ha arrojado la representación mexicana de Mitsubishi durante los últimos meses han sido muy positivos, con un crecimiento durante el 2005 que anduvo en el orden del 25%. Con ello, los planes para introducir nuevos modelos están más sólidos que nunca. Ejemplos hay varios, como el más reciente Lancer Evolution IX; la Grandis, que llegará antes de que termine el año; el Colt, del que nos hemos enterado tiene probabilidades de llegar a estas tierras en poco tiempo y, desde luego, el Eclipse Convertible, que presume una figura incluso más atractiva que el Coupé.

El derivado sin techo del Eclipse Coupé monta un toldo de lona suave que se retrae eléctricamente con sólo presionar un botón, para que después de apenas 20 segundos podamos bañarnos con el sol a más no poder; o protegernos de la lluvia si es que ya estábamos disfrutando del paisaje. Como era de esperarse, el lugar que ocupa todo el sistema y el toldo mismo sacrifica espacio de la cajuela y del asiento trasero que, aunque sigue ofreciendo dos lugares con todo y cinturones, serán niños pequeños los que apenas encontrarán cierta comodidad.

Una vez en marcha, podemos apreciar casi de inmediato el extra de rigidez que los ingenieros de la marca lograron en el bastidor para compensar la falta de los postes y el techo, logrando una marcha competente y con relativamente pocas vibraciones. La suspensión también ha sido endurecida aunque el calibrado, al menos para nuestro gusto, sigue calificando como blando; un poco más de rigidez le vendría bastante bien.
Además, durante la prueba de manejo en las afueras de Los Ángeles y después en los alrededores de la presa Hoover, nos pareció que la dirección del modelo descapotado es más directa que la del Coupé, con reacciones más bien rápidas; sólo la ligereza del eje posterior nos obliga a ser prudentes con los cambios bruscos de dirección y, por con siguiente, con las transferencias de pesos que podían provocar sobreviraje con relativa facilidad. Bajo el cofre está el mismo V6 del Coupé.

Un motor de 3.8 litros y 263 HP que entrega un rendimiento muy competente y que a la altura del nivel del mar permite lanzamientos con mucho humo proveniente de las llantas delanteras; a la altura del DF es probable que ronde los 9 segundos en el 0 a 100 km/h. Estára disponible con transmisión manual de seis velocidades o automática de cinco, con precios de 268 y 278 mil pesos, respectivamente.

El equipamiento es idéntico en todas las variantes e incluye vestiduras de piel, climatizador, sistema de audio Rockford Fosgate con amplificador y subwoofer, cuatro bolsas de aire, ABS y control de tracción, entre otros. En México, la marca considera como rival principal al Ford Mustang GT. Siendo más estrictos, y tomando en cuenta su configuración de motor V6, toldo suave y cuatro plazas, también enfrenta al Cirrus y el Solara.